¡Por fin (casi) todo sobre la enuresis!

¿Qué es la enuresis?

Son muchas las informaciones que aparecen sobre los niños que se hacen pis en la cama, la conocida como enuresis, pero todavía hay cierta confusión. Por eso, de la mano de las principales guías de pediatría y expertos, queremos ayudarte a entender un poco mejor ¿qué es la enuresis?, ¿a quién afecta?, ¿por qué se produce?, etc.

¡En este post aclararás tus ideas!ENURESIS NOCTURNA INFANTIL

Los expertos definen la enuresis como la “eliminación nocturna, involuntaria y funcionalmente normal de orina que ocurre a una edad en la que cabe esperarse en el niño un control voluntario de la micción”, por eso la denominan también enuresis nocturna y comúnmente la conocemos como mojar la cama o hacer pis en la cama. Se produce “al menos dos noches por mes, después de la edad a la que se alcanza el control vesical (4-6 años) en ausencia de defectos congénitos o adquiridos del tracto urinario”.

Las principales guías de clasificación de enfermedades, especialmente la de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la consideran una enfermedad, es por eso que se recomienda consultar con el pediatra si el niño, pasados los 5 años, sigue mojando la cama por las noches porque “es un trastorno, posiblemente, infra diagnosticado y, por lo tanto, infra tratado”.

¿A quién afecta?

La enuresis puede afectar a cualquier niño, considerándose enuréticos aquellos niños que tienen dificultades en el control miccional nocturno al menos una vez al mes (criterio diagnóstico establecido por la OMS y por la Sociedad Internacional de Continencia de los Niños o ICCS, por sus siglas en inglés). Las estadísticas indican que se produce con más frecuencia en niños que en niñas, quizás sea debido a que “las niñas consiguen la maduración vesical más precozmente que los niños, unos 2 o 3 meses antes”.

A ello hay que añadir la dificultad en la detección de estos niños “porque sus padres, probablemente enuréticos en su infancia, no conocen la existencia de abordaje médico ni lo asocian a un problema pediátrico”.

Su detección puede verse dificultada pues, frecuentemente, es considerado un problema menor. Si los padres no consultan al pediatra específicamente y, si en la revisión de 6 años del Programa de Salud Infantil no se pregunta, puede pasar desapercibido hasta edades muy tardías, cuando “realmente puede llegar a ser un problema de salud importante en niños y adolescentes, mucho más de lo percibido por los pediatras”.

¿Y cuántos niños enuréticos hay?

Se estima que la enuresis “afecta al 16% de los niños de 5 años, al 10% de los de 6 años y al 7,5% de los de 10 años de edad” pero, al hacer un seguimiento a largo plazo, vemos “una resolución espontánea con una frecuencia aproximada del 15% anual”.

Aun así, “a partir de los 15 años de edad todavía persistirá el problema en un 1-3% de la población”.

Las cifras de enuresis se repiten indistintamente del país o la época, sin sufrir alteraciones a lo largo de los años.

Si atendemos al total de población entre 5-10 años según datos del INE y considerando de media, que el 11,16% de los niños 5-10 años tiene enuresis, se estima que 500.000 niños en España la sufren.

¿Todas las enuresis son iguales?

No, los expertos las clasifican en función del momento de aparición y su asociación con otras afecciones. Tipos de enuresis:

  • Enuresis nocturna primaria. No existe un periodo previo prolongado de sequedad.
  • Enuresis nocturna secundaria. Aparece después de un periodo de sequedad de al menos 6 meses consecutivos sin ayuda.

Y según la terminología más reciente y de la presencia de otros síntomas acompañantes:

  • Enuresis nocturna mono sintomática o no complicada. No existe una sintomatología diurna que sugiera la existencia de una patología nefrourológica.
  • Enuresis nocturna no mono sintomática o complicada. Cuando además el niño presenta síntomas urinarios diurnos (urgencia miccional, aumento/disminución de la frecuencia urinaria, escapes, chorro urinario débil, dolor…) que sugieren patología nefrourológica, como vejiga hiperactiva, micción no coordinada, etc. En este caso se puede emplear también el término de síndrome enurético.

Algunos autores también incluyen en este apartado a la enuresis asociada a encopresis/estreñimiento u obstrucción de las vías respiratorias altas.

Principales causas de la enuresis nocturna infantil

Un aumento de la producción de orina durante la noche (por ausencia de la elevación de hormona antidiurética que da lugar a una poliuria nocturna) y una función vesical anormal (capacidad vesical reducida, hiperactividad vesical), asociadas a un fracaso en el mecanismo del despertar ante el estímulo vesical, son los factores responsables.

Además, hay otros factores asociados como son la predisposición genética, los factores psicosociales, los factores ambientales y otros factores patológicos: estreñimiento, encopresis, trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y síndrome de apnea obstructiva del sueño (SAOS).

Desde hace más de un siglo se conoce la evidencia que sugiere el vínculo genético de la enuresis. Investigaciones recientes del primer estudio mundial de asociación del genoma (GWAS en sus siglas inglesas) en la enuresis, indican que es probablemente hereditaria. El riesgo de orinarse en la cama es de 5 a 7 veces mayor entre los niños con un padre que sufrió enuresis de niño y aproximadamente 11 veces mayor si ambos padres mojaron la cama.

¿Qué consecuencias tiene para el niño?

Está comprobado que la enuresis puede causar diversos consecuencias emocionales en los niños como la autoestima, el bienestar emocional y la actividad diurna del niño, incluido el rendimiento escolar y social; estos niños muchas veces no salen de casa, no van a casa de sus amigos, no duermen con familiares, no acuden a campamentos, porque no quieren que se sepa que se orinan en la cama.

La enuresis no es culpa de nadie y tanto familias como médicos deberían poder hablar sobre el problema sin vergüenza o sentimiento de culpa. Sin embargo, el impacto a menudo se subestima y trivializa, por lo que no se busca ni se ofrece ayuda.

En muchas ocasiones se ha etiquetado de “problema o enfermedad menor”, lo que ha permitido que no se le prestara la atención necesaria. No obstante, realmente puede llegar a ser un problema de salud importante en niños y adolescentes, mucho más de lo percibido por los pediatras.

La enuresis se ha relacionado con “situaciones de ansiedad crónica, problemas de autoestima y retraso en la esfera social. En este sentido, la enuresis se puede considerar como un problema importante de salud, para el que su diagnóstico precoz y ABIRDAJEpueden ayudar a estos niños a mejorar su calidad de vida”.

La enuresis tiene solución, el pediatra sabe cuál

Existen diferentes tipos de abordajes. Será el pediatra quien recomiende, tras las pruebas diagnósticas (historia clínica, calendario miccional, anamnesis, exploración, etc.) qué opción tomar.

La enuresis a partir de los 5 años tiene una tasa de curación alta pero los estudios indican claramente que una intervención temprana hace que los niños se dejen de orinar antes y las complicaciones de todo tipo que entraña padecerla sean más leves y desaparezcan antes.

La enuresis moderada (3-6 noches/semana) o grave (diaria) y la que persiste pasados los 9 años de edad, difícilmente se resolverá sin abordaje.

 


¿Tienes más preguntas sobre la enuresis? Descubre más en el apartado de preguntas frecuentes.

ES-PED-2100054