Mitos sobre la enuresis

MITOS SOBRE LA ENURESISEn una sociedad de sobreinformación como la que estamos viviendo, donde en las redes sociales se registran comentarios de todo tipo de fuentes, es importante pararse un minuto a analizar si aquello que leemos, vemos o escuchamos, proviene de una fuente solvente y experta en el tema del que habla.

La información sobre salud es especialmente sensible, por eso, es importante dejarse guiar por los expertos y no recurrir a consejos de conocidos, amigos o personas relevantes no expertas en la materia que, aunque puedan hacerlo con la mejor de las intenciones, podrían llegar a confundirnos.

En relación a la enuresis, mojar la cama por las noches, circulan una serie de ideas preconcebidas y mitos que pueden, en cierta medida, alejarnos de las recomendaciones de los expertos. Nos gustaría mencionaros algunos:

 

Los niños se hacen pis en la cama por vaguería o dejadez: falso

Muchas personas tienden a creer que los niños se hacen pis en la cama porque les da pereza levantarse o son vagos. La enuresis se debe, en su gran mayoría, a  problemas físicos como “una producción incrementada de orina durante la noche (por ausencia de la elevación de hormona anti diurética –ADH- que da lugar a una poliuria nocturna) y una función vesical anormal (capacidad vesical reducida, hiperactividad vesical), asociadas a un fracaso en el mecanismo del despertar ante el estímulo vesical”.

Además de los factores fisiopatológicos aceptados mayoritariamente, los expertos describen otros factores asociados, alguno de ellos ampliamente estudiado como “la predisposición genética, los factores psicosociales, los factores ambientales y otros factores patológicos: estreñimiento, encopresis, patología obstructiva de la vía respiratoria alta, etc.”.

Por eso no debe regañarse al niño ante un escape nocturno pues es algo que no puede controlar.

 

La enuresis no afecta al sueño: falso

El sueño de los enuréticos sí se ve afectado. Los niños que se hacen pis en la cama de manera regular se despiertan con más frecuencia que los niños que no padecen enuresis, lo que afecta de manera directa a su rendimiento al día siguiente. Según nos indican los autores de la Guía “5 preguntas frecuentes en enuresis infantil”, el sueño de los niños se ve alterado por la enuresis, así “el trastorno del sueño en los niños enuréticos es prácticamente constante. Se caracteriza por un umbral alto de activación. Además, el sueño es fragmentado, de tal modo que los niños muestran un elevado número de despertares nocturnos y tardan más en quedarse dormidos, lo que favorece la elevación del umbral del despertar”.

 

Los niños que mojan la cama lo hacen, en su gran mayoría, por un problema psicológico: falso

 “No se trata de un trastorno psicológico, sino que frecuentemente está motivado por un aumento nocturno de la producción de orina, la dificultad para despertarse por la noche o una capacidad reducida de la vejiga”.

 Es cierto que en ocasiones la enuresis está asociada a problemas como “nivel socioeconómico bajo, problemas conyugales, muerte de uno de los padres, nacimiento de un hermano, inicio o rechazo escolar, abuso sexual, hospitalización, etc.”, pero, en la mayoría de los casos, se debe a causas físicas u orgánicas.

 

El pis en la cama no afecta a los niños, pues no le dan importancia: falso

Mojar la cama trae consecuencias importantes para los niños y sus familias, “realmente puede llegar a ser un problema de salud importante en niños y adolescentes, mucho más de lo percibido por los pediatras” y está “relacionado con situaciones de ansiedad crónica, problemas de autoestima y retraso en la esfera social”.

Aunque como adultos pensemos que no está afectando a los niños, es algo que no debemos dejar pasar, ya que influye en sus vidas más de lo que podamos imaginar.

 

Solo hay que dejar pasar el tiempo, la enuresis se cura con la edad: falso

Aunque es cierto que en parte de los casos sí que se resuelve por sí sola, no siempre es así y no todos los niños dejan de hacerse pis en la cama espontáneamente, ni en el momento adecuado de sus vidas. De hecho, un porcentaje de ellos seguirán sufriéndola en la adolescencia y juventud, e incluso en la edad adulta.

La enuresis afecta al 16% de los niños de 5 años, al 10% de los de 6 años y al 7,5% de los de 10 años de edad. Cuando se realizan seguimientos a largo plazo de sujetos enuréticos, se objetiva una resolución espontánea con una frecuencia aproximada del 15% anual, a pesar de lo cual, a partir de los 15 años todavía persistirá el problema en un 1-3% de la población”.

Por eso, si pasados los 5 años el niño sigue mojando la cama, es importante consultar con el pediatra.


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